Y
hablando de la suciedad de Madrid, el Monumento de Dalí, en la plaza de Felipe
II, poco menos que está en el basurero. Y quien no lo crea que le eche un
vistazo a la web de Madrid, Ciudadanía Y Patrimonio. Eso sí, un basurero muy
ordenado, cada contenedor bien colocado... ¡a los pies
del monumento!
¡Pero
qué falta de respeto, oiga!
Si Dalí
levantara la cabeza... Cuando no le roban la bola, le ponen los contenedores a
sus pies.
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