En la manzana comprendida entre las
calles de Joaquín María López, Andrés Mellado, Donoso Cortés y Gaztambide
estuvo el colegio de San José de Calasanz que fue derribado en los años 70 del
siglo XX.
En su lugar se construyeron un bloque de viviendas y un parque que
lleva el nombre del fundador del colegio, en la zona donde se hallaban los
campos de juego. En el parque hay repartidos varios
restos de esculturas que nadie sabe de dónde proceden.
En el año 2000 se
construyó un aparcamiento subterráneo y se aprovechó para allanar el parque que
siempre había tenido una fuerte pendiente y se decoró, aleatoriamente, con
diferentes restos de muy diversa procedencia como es el caso de un busto y un
escudo del siglo XVIII los dos, o algunos frisos decorados con toscas hojas de
hiedra que podrían ser del siglo XIX o del XX inclusive, cuatro patas de banco
de piedra caliza y el basamento de un pedestal, entre otras cosas.
Del libro “Los porqués de Madrid”, Isabel Gea.
Ediciones La Librería. ___ edición. ___ €.
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