Ir al contenido principal

655.000 euros de los bolsillos de los madrileños





Buenos y nublados días desde mi Madrid del alma :)

Anoche dijeron en la tele sobre el tiempo que hoy, sería el día menos malo del resto de la semana. Pues aprovechémoslo entonces. De momento, tenemos 11,5ª de temperatura, 45% de humedad (mal para las narices resecas) y viento del Sur de 16 km/h con rachas que pueden llegar a alcanzar los 42 km/h. Para esta tarde hay riesgo de que caigan algunas gotas y la temperatura máxima será de 13 grados. Todos los datos son de la Aemet. El sol nos dirá adiós a las 19:32 horas y la luna, en cuarto decreciente, solo tiene ya un 17,96% de luminosidad.

Vamos con las noticias de hoy jueves:

Mientras la alcaldesa pide urgentemente a la delegada del gobierno que prohíba las manifestaciones en el centro de Madrid, esta le replica que lo pida por los cauces legales, no en rueda de prensa.

Y los unos por los otros, la casa sin barrer y mientras tanto, a los madrileños nos toca pagar, una vez más, los destrozos de una horda de vándalos que dejaron el sábado pasado un tramo del paseo de la Castellana arrasado. La marcha por la Dignidad terminó en indignidad para todos los madrileños que, como si no tuviéramos ya un montón de impuestos y tasas municipales, ahora tenemos que pagar a tocateja más de medio de millón de euros repartidos como siguen: 166.000 por destrozos en la vía pública, 405.000 de gasto de seguridad y 89.000 de limpieza. ¡Tócate la pera! que diría mi amiga Lules.

Cada manifestación vandálica la pagamos los madrileños sin rechistar. Y en lo que va de año, ya ha habido más de 700 manifestaciones (no vandálicas, la inmensa mayoría). ¡Y las que nos quedan!

Como siempre digo, el derecho de manifestación está contemplado en la Constitución, pero lo que no está contemplado en la Carta Magna es el derecho de vandalismo. Que la gente se manifieste pacíficamente, que es como tiene que ser, pues a nadie se le prohíbe hacerlo, pero de lo que ya estamos hartos los madrileños es de tener que pagar siempre los destrozos vandálicos.

Ya sé que es un tema muy polémico el de las manifestaciones, pero a mí que me explique alguien por qué la marcha por la Dignidad acabó con 101 heridos, 67 de ellos, policías, y destrozos por un valor de 655.000 euros y sin embargo al día siguiente, la manifestación de Sí a la vida, no hubo ni un solo incidente.

Acepto todas las críticas que puedan derivar de este tema. Pero por mucho que me repitan que la manifestación es un derecho contemplado por la Constitución y así lo acepto sin chistar, nunca entenderé los actos de vandalismo con que acaban algunas manifestaciones. ¡Ojo!, he dicho “algunas”, no todas acaban así, por supuesto.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Por qué los madrileños llaman Lista a la calle de José Ortega y Gasset?

La calle de José Ortega y Gasset recibió este nombre en 1955, cuando se eliminó su primera denominación, calle de Lista, el cual se asignó en 1871 y estaba dedicada al sacerdote, escritor y matemático sevillano del siglo XVII, Alberto Rodríguez Lista y Aragón.  A pesar de los años transcurridos desde que recibió su nueva denominación, popularmente, los madrileños la siguen llamando Lista, quizá también por la permanencia del nombre en la estación de metro. Del libro “Los porqués de Madrid”, Isabel Gea. Ediciones La Librería. ___ edición. ___ €. http://www.edicioneslalibreria.es/  

Origen del nombre de Moncloa

El distrito de Moncloa debe su nombre a los condes de Monclova (con v) ‑título que ostentan actualmente los duques del Infantado-, dueños de gran parte de los terrenos donde hoy se asienta el distrito.  Los condes residían en el antiguo palacete de la Moncloa el cual pasó a distintos propietarios y fue destruido durante la Guerra Civil, por ser toda esta frente de batalla.  El actual palacio de la Moncloa, mucho menor en tamaño, se construyó imitando el estilo antiguo del primitivo.  Del libro “Curiosidades y anécdotas de Madrid”, 2ª parte Isabel Gea. Ediciones La Librería. 5ª edición. 6,50€. http://www.edicioneslalibreria.es/

¿Por qué el edificio del Teatro Real tiene forma de ataúd?

El Teatro Real se construyó en el solar del antiguo teatro de los Caños del Peral que fue derribado por su mal estado en 1817. Un año más tarde, comenzó la construcción del nuevo teatro que se prolongó a lo largo de más de treinta años, siendo inaugurado en 1850 por la reina Isabel II. La planta del teatro resultó muy forzada por el solar que ocupaba, lo que había obligado al arquitecto Antonio López Aguado a articular la sala y el escenario de tal manera que quedaron muchos espacios vacíos así como un difícil tránsito a través de las alas y de las cajas de escaleras. Como la entrada por la plaza era de uso exclusivo para la familia real, y el público entraba por la fachada posterior en la plaza de Isabel II, los espectadores se veían obligados a recorrer interminables pasillos y escaleras. Pascual Madoz, en su Diccionario Geográfico señaló que «este edificio [el teatro] tiene la planta mas ingrata que para un edificio de esta clase ha podido elegirse». En cualquier calleje