Como
cuenta Madridiario, se «está estudiando la sustitución de la
membrana interior del monumento por otro sistema más sostenible y que
requiera un mantenimiento menos complicado. Y es que dicha membrana, situada en
la parte superior de la cúpula de la sala dedicada a esta tragedia en la
estación, dentro del prisma acristalado visible desde la
superficie, funciona como una especie de globo muy sensible a las
corrientes de aire y los cambios de presión (que explican la necesidad de
que la sala cuente con dos puertas).»
Por eso, «se está buscando una solución que facilite la
presurización y el aislamiento de esta cámara de aire decorada, sin que se
pierdan los elementos estéticos de esta obra de arte».
Comentarios
Publicar un comentario