¿No habíamos
quedado en que las obras de remodelación de esta plaza iban a ser gratis a los
madrileños? Pues ahora resulta que nuestra querida y nunca bien ponderada
alcaldesa ha adelantado 42 millones de euros para su reforma. Se suponía que
las obras serían financiadas por empresarios y operarios hoteleros quienes se
habían comprometido a ello.
Nadie
nos dijo que el “coste cero” para los madrileños consistía en adelantar el
dinero. ¿Y si los empresarios se echan atrás y deciden no financiar? ¿Quién nos
devuelve a los madrileños entonces el dinero?
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