Son asombrosas las larguísimas colas que se forman en
navidades frente a Casa Mira. La gente aguanta estoicamente el frío y las colas
porque saben que el turrón de Casa Mira es turrón hecho como Dios manda.
Su
fundador, Luis Mira, llegó a Madrid procedente de Asturias en 1850 y se dedicó
a vender turrones de forma ambulante en la Puerta del Sol, hasta que, cinco años más tarde,
se estableció en el número 30 de la
Carrera de San Jerónimo.
En la actualidad, la tienda está
regentada por Carlos Mira, tataranieto del fundador, sexta generación de la
familia al frente del mismo negocio. Para quien esté interesado, los turrones
se fabrican en los talleres que tienen en Jijona y en la trastienda.
Del libro “Curiosidades y anécdotas de Madrid”, Isabel Gea.
Ediciones La Librería. 10ª edición. 6,50€.
http://www.edicioneslalibreria.es/
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