... especial para Jacinto
Seguro
que Jacinto sabe mucho sobre este triste túnel que hoy se esconde bajo el patio
de un colegio concertado, en Usera. Se conserva intacto, con sus 67 nichos a
ambos lados del corredor, algunos de ellos vacíos pues los familiares de los
allí fusilados en noviembre de 1937 los trasladaron a otros cementerios. Hasta
hace unos años, descendientes de las víctimas celebraban una misa en su memoria
en este triste túnel convertido en una pequeña cripta rectangular con su altar
al fondo. Hasta el propio Hemingway conocía este triste túnel del que se
refiere en su célebre novela “Por quién doblan las campanas”.
Y
seguro que Jacinto, puede contarnos cosas que los “lugareños” más ancianos le
habrán contado de viva voz.
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