Entre la Gran Vía y la calle de la Abada.
El nombre de
Chinchilla lo tomaba del alcalde y magistrado Francisco Chinchilla, que tenía
su casa en este lugar y que a pesar de que prohibió tirar inmundicias en su
calle, nadie la hacía caso.
Cierto día vio a una mujeres pelando unas aves
muertas en su calle y al preguntarlas contestaron que las habían encontrado
allí mismo y que el día anterior, incluso habían hallado una lechuza que les
sirvió de comida. Como le alcalde las arrestó, al día siguiente apareció una
lechuza clavada en la esquina de su casa. Por este motivo, la calle fue
conocida por un tiempo con el nombre de Lechuza y en 1835 lo cambió por el de
Chinchilla.
Del libro “Los
nombres de las calles de Madrid”, Isabel Gea.
5ª Edicion - Fecha de la
publicación: 14 Mayo 1993
Precio 6.90 €. / Ebook 3.45 €.
Editorial: Ediciones La
Librería.
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