Ir al contenido principal

Día de reflexión





Aparte de reflexionar el voto para mañana, quien vaya a votar, claro, hay algo que invita a la reflexión por la pérdida que supone para el patrimonio histórico-artístico de Madrid y los madrileños: las fachadas de los comercios tradicionales.

Hace unos días me escribía Vicente Patón, arquitecto y presidente de Madrid, Patrimonio y ciudadanía, dándome las gracias, como siempre, por mis resúmenes de prensa y me comentaba que estos últimos días mi resumen más parecía una necrológica: «es tremendo pero las noticas que recoges de prensa son cada vez más “necrológicas”. Tras el certificado de defunción del Albéniz, viene el del conjunto de Canalejas, y ese horror que proponen de convertir la Plaza de España en un “shopping” tipo mini AZCA, que para más oprobio llaman Cervantes.»

Hoy, El País, trae una noticia “necrológica” que nos tiene que hacer reflexionar: recoge 17 fachadas desaparecidas sin que el Ayuntamiento haya dicho ni pío. Fachadas catalogadas para su conservación en 1997 y que, a día de hoy, nada tienen que ver con lo que fueron antaño. La Agencia de Gestión de Apertura de Actividades Económicas, del Ayuntamiento (ANGLA), no tiene constancia de los cambios sufridos en las fachadas de numerosos establecimientos tradicionales madrileños.

Como señala el arquitecto Vicente Patón en el artículo, «el catálogo de tiendas es un desastre. Un propietario llega, cambia lo que hay, aunque esté protegido, y no pasa nada. Es una pena. Se está malversando, por absoluta indiferencia, un patrimonio que está muy conectado con el urbanismo de la ciudad”».

Por otra parte, la Asociación de Comercios Centenarios de Madrid se queja de la falta de ayudas para un patrimonio que es muy caro de cuidar y mantener e, incluso, puede suponer una trampa para el nuevo propietario del local cuando pretende llevar a cabo unas obras y se topa con la negativa del Ayuntamiento por estar catalogado.

Así que lo más fácil, es tirar lo que haya de conservarse y adaptar la fachada al nuevo negocio, es lo que se llama política de hechos consumados.

Entre los años 1980 y 1988, la Cámara de Comercio e Industria de Madrid publicó varios tomos dedicados a lo que ellos mismos titularon para la serie “Establecimientos Tradicionales Madrileños”. Cada uno de ellos estaba dedicado a una zona de ña ciudad hasta llegar al 8º que comprendía “la periferia de Madrid y pueblos de la Comunidad”. Una obra básica de consulta para aquellos que quieran conocer los orígenes e historia de las tiendas tradicionales de Madrid: ultramarinos, lecherías, carbonerías, papelerías, mantequerías, panaderías, fontanerías, imprentas, cesterías, esparterías, numismáticas, gorras y sombreros, artículos militares... y tantos y tantos comercios que hemos conocido y que, silenciosamente, han ido desapareciendo.

Del catálogo de los ocho tomos, cientos de comercios de entonces, desconozco los que  quedan en la actualidad. Mejor no saberlo.


¡Buen sábado para tod@s!

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Por qué los madrileños llaman Lista a la calle de José Ortega y Gasset?

La calle de José Ortega y Gasset recibió este nombre en 1955, cuando se eliminó su primera denominación, calle de Lista, el cual se asignó en 1871 y estaba dedicada al sacerdote, escritor y matemático sevillano del siglo XVII, Alberto Rodríguez Lista y Aragón.  A pesar de los años transcurridos desde que recibió su nueva denominación, popularmente, los madrileños la siguen llamando Lista, quizá también por la permanencia del nombre en la estación de metro. Del libro “Los porqués de Madrid”, Isabel Gea. Ediciones La Librería. ___ edición. ___ €. http://www.edicioneslalibreria.es/  

Origen del nombre de Moncloa

El distrito de Moncloa debe su nombre a los condes de Monclova (con v) ‑título que ostentan actualmente los duques del Infantado-, dueños de gran parte de los terrenos donde hoy se asienta el distrito.  Los condes residían en el antiguo palacete de la Moncloa el cual pasó a distintos propietarios y fue destruido durante la Guerra Civil, por ser toda esta frente de batalla.  El actual palacio de la Moncloa, mucho menor en tamaño, se construyó imitando el estilo antiguo del primitivo.  Del libro “Curiosidades y anécdotas de Madrid”, 2ª parte Isabel Gea. Ediciones La Librería. 5ª edición. 6,50€. http://www.edicioneslalibreria.es/

¿Por qué el edificio del Teatro Real tiene forma de ataúd?

El Teatro Real se construyó en el solar del antiguo teatro de los Caños del Peral que fue derribado por su mal estado en 1817. Un año más tarde, comenzó la construcción del nuevo teatro que se prolongó a lo largo de más de treinta años, siendo inaugurado en 1850 por la reina Isabel II. La planta del teatro resultó muy forzada por el solar que ocupaba, lo que había obligado al arquitecto Antonio López Aguado a articular la sala y el escenario de tal manera que quedaron muchos espacios vacíos así como un difícil tránsito a través de las alas y de las cajas de escaleras. Como la entrada por la plaza era de uso exclusivo para la familia real, y el público entraba por la fachada posterior en la plaza de Isabel II, los espectadores se veían obligados a recorrer interminables pasillos y escaleras. Pascual Madoz, en su Diccionario Geográfico señaló que «este edificio [el teatro] tiene la planta mas ingrata que para un edificio de esta clase ha podido elegirse». En cualquier calleje...