Como
tod@s sabéis, los últimos meses he estado prácticamente “missing” para darle el
último empujón al libro que tenía entre manos. Ahora, una vez entregado, ya os
puedo presentar un anticipo de lo que será la Guía visual del Madrid desaparecido. Un libro que saldrá en papel
de cara a las navidades, en el mismo estilo y formato que la Guía visual de arquitectura, que tan
buen resultado ha dado -y sigue dando-, pues ya va por la 4ª edición.
Como digo en broma, en dos años y medio he
hecho la carrera de Arquitectura y un máster. Dos años y medio aprendiendo y
dibujando edificios que ya no existen. Dos años y medio que me he dejado el
cuerpo y el alma -y también la vista- en un libro, mejor dicho, EL LIBRO, con
mayúsculas, porque ha sido el que más tiempo me ha llevado hacerlo y
redactarlo. Y que esperamos que llegue a tener el mismo éxito que su hermana
mayor, la Guía visual de arquitectura.
Un
libro que habría sido imposible llevar a cabo por mi parte si no hubiese sido
por René Guzmán, el mejor profesor de arquitectura del mundo mundial que con
tanta paciencia me enseñó a dibujar con un programa -el Adobe Illustrator- que
visto lo visto, no es para usuario final si no se tienen unos conocimientos
básicos de dibujo por ordenador. Yo empecé a aprender desde cero. ¿Que
mis dibujos se pueden mejorar?, no lo pongo en duda, pero os aseguro que he
puesto todo mi empeño en que quedaran lo mejor posible. Y ahora, dos años y medio después, veo un
edificio, ya sea en las calles de Madrid o en una foto y me digo “sé cómo
dibujarlo sin problemas”. ¡Gracias, René!
Jamás
pensé que yo aprendería a dibujar con un programa tan enrevesado, al menos para
mí, como el “Ilus”, como yo lo llamo. Y mis primeros pinitos fueron apareciendo
en el blog, con diseños de páginas arrancadas de cuadernos, de pergaminos
antiguos, de posits, clips y demás “adornos”. Con ello pretendo que el blog sea
diferente, que no se limite a textos y fotos, sino que además, tenga un diseño
variado.
El
“catálogo” del Madrid desaparecido es muy voluminoso, cada vez más. Pero no es
algo nuevo, no es algo que ocurra solo en la actualidad, no. Como pongo en la
introducción: «el derribo o el vaciado, han sido y serán, una práctica
habitual. Los franciscanos, a mediados del siglo XVIII, tiraron abajo la
antigua iglesia de San Francisco sin ningún respeto por el valor artístico de
las capillas, sepulcros y esculturas funerarias que había en su interior. A
finales del siglo XIX, el duque de Sesto, ahogado por las deudas, vendió su
palacio -el del marqués de Alcañices- al Banco de España. El duque de
Montellano, lisa y llanamente, derribó el palacio de Indo que adquirió en 1901
para construir el suyo propio tres años más tarde (en su lugar hoy se alzan los
edificios de Mutua Madrid, antes La Unión y el Fénix).En 1913, un palacete, al
otro lado del Manzanares, fue demolido sin contemplaciones, había sido la
última residencia de Francisco de Goya, perdiéndose la oportunidad de haber
creado un museo sobre el genial pintor aragonés».
Aprovecho igualmente desde aquí a dar las gracias a Pedro
López Carcelén quien ha dibujado los dos tercios restantes de los edificios. Yo
sola no habría podido con todos pues son el total 158
edificios desaparecidos.
No me extiendo más, así que con todos ustedes... ¡la Guía
visual del Madrid desaparecido! Un libro que tiene muchos datos inéditos,
muchas “exclusivas” y en el cual desmonto, por ejemplo, la famosa leyenda del
doble crimen del palacio del marqués de Casa Riera.
¡Próximamente,
en todas las librerías de Madrid!
Haciendo historia y siempre arriesgando, que envidia. Muy bonito. Esperaré a Navidades.
ResponderEliminarSaludos, Enrique.
¡Gracias, Enrique, viniendo de ti es un honor! :)
ResponderEliminarEl Madrid desaparecido, o el Madrid no construido, son temas que nos apasionan.
ResponderEliminarY además en forma de guía visual tiene una pinta interesantísima... no hace falta decir más.
¡Muchas gracias, Jesús!
ResponderEliminarEl Madrid desaparecido es mi tema favorito y por eso me he volcado con este libro :)
¡¡Genial, Isabel!! Un proyecto interesantísimo al que ya estoy haciendo espacio en mi biblioteca. ¡¡¡Enhorabuena!!! Un saludo
ResponderEliminar¡¡Gracias, Eduardo!!
ResponderEliminarSaludos madrileños